Entre las más de 30 cascadas que gobiernan el panorama natural de Cuetzalan, existe una que destaca entre todas por un punto en común: es el tranquilo pulso de toda la zona. A sus alrededores se encuentra una inmensa calma donde la fuerza del agua se conecta directamente con el espíritu de todo viajero. Conoce la Cascada El Salto y visítala en cuanto antes.
La cascada El Salto es ideal para la práctica del rápel, el cual es impactante desde la parte más alta. Aquí podrás bajar varios metros y sentir la brisa del agua golpeando contra tu cuerpo. Si eres amantes de la adrenalina puedes tirarte de una tirolesa, ubicada muy cerca de la cascada. Ésta se encuentra a una altura de 30 metros y atraviesa el cañón Cuichat.
“ El sonido del agua, el canto de las aves así como el viento, te harán querer regresar cuantas veces puedas. .”
La primera parada es el descenso en rappel, ésta se realiza a una altura de más de veinticinco metros; anímate y realízala en medio de la cascada o junto a ella. Siente el golpeteo de la fuerza del agua contra tu cuerpo.
Si eres amante de la adrenalina tírate por la tirolesa, situada a más de 30 metros de altura. Atravesarás el cañón del río Cuichat que tiene 200 metros de largo. El sonido del agua, el canto de las aves y el viento sobre tu cara harán de esta experiencia algo único.
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